Me ha parecido oportuno publicar esta entrada hoy porque es un día a tener en cuenta, un día en el que se recuerda importancia de eliminar la violencia hacia las mujeres. Es un tema actual y relevante, por lo que, obviamente, no puede dejar de trabajarse en la escuela.
Desde nuestro cole, la comprometida seño Marta Tena (coordinadora del Plan de Coeducación) nos propuso al claustro dar un giro a nuestra visión de este día y trabajar en clase sobre los "buenos tratos". En este sentido, cada tutor/a ha visionado con su grupo-clase diferentes imágenes en las que se mostraban malos tratos, tanto de niños hacia niñas como de niñas hacia niños (gritar y tratar mal a otra persona porque no quiere hacer lo que le dices, personas burlándose de niños/hombres que lloran al mostrar sus sentimientos, etc.).
Además, relacionándolo con el día de los derechos de la infancia (20 de noviembre), cada buen trato estaba ligado a un derecho que tienen los niños y niñas. A continuación os explico un ejemplo de lo que hemos hecho en la clase de 3ºA.
Se les plantea a los niños y niñas la siguientes situaciones: "A una niña le encanta el fútbol. Ha ido a jugar con los demás, pero le han dicho que no puede jugar porque es una niña." "Un niño quiere jugar a las muñecas y las niñas no le dejan porque es un niño." A partir de aquí comentamos qué les parecían estas suposiciones, ¿estaban de acuerdo?, ¿creían que se había actuado mal? La conclusión unánime, sin influir mi opinión en ningún momento, fue que no hay juegos de niños o de niñas y que cada uno puede jugar a lo que quiera.
Por lo tanto, unimos este "mal trato" con el derecho de que "los niños y las niñas tenemos el derecho a jugar a lo que nos guste" y sacamos dos buenos tratos alternativos: "Dar a todos/as la oportunidad de jugar a lo que quieran" y "Respetar los gustos de los demás."
Trabajamos muchas más situaciones y derechos. Algunos de los buenos tratos que salieron fueron:
- Sentir empatía por los demás.
- Dar a todos/as la oportunidad de jugar a lo que quieran.
- Respetar las decisiones de los demás.
- Hablar para ponerse de acuerdo.
- Animar a las personas a conseguir sus objetivos.
- Respetar los gustos de los demás.
Considero que la escuela tiene un papel fundamental en lo que a este tema se refiere y creo que no hay mejor forma de tratarlo que hablando y reflexionando sobre él. Sinceramente me quedé gratamente sorprendida de las conclusiones y reflexiones que salieron en clase, por lo que pienso que estamos en el camino correcto y que aún podemos conseguir el cambio que esta sociedad tanto necesita.
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